Participé hace unos días en una charla sobre el crecimiento empresarial en esa magnífica iniciativa que es Link by UMA en la que compartimos las que pueden ser las palancas del crecimiento, tres más una.
La primera palanca es generar una visión clara de crecimiento futuro para lo cual no solo deberá haber una estrategia definida, con un perfecto conocimiento del cliente, lo que desea, sus necesidades y problemas, pero no de ahora, sino de futuro. Igualmente, el autoconocimiento de la empresa es esencial para clarificar sus capacidades y recursos, sus fortalezas y debilidades. Y, una radiografía fidedigna de la competencia, saber quiénes son, qué están haciendo, y qué podrán hacer el futuro. Esta definición tiene que llevar consigo el detalle del soporte que la hará posible, porque sin esto, lo más probable es que cuando comience el crecimiento las carencias existentes nos metan en dificultades operativas, de producto o financieras. Por ello, diseñar el modelo organizativo y estructura necesaria, el rol a jugar por la tecnología en los procesos de negocio, la estructura de capital idónea y las capacidades a adquirir. Obviamente, este debe rematarse por un plan de ejecución, que como sabemos suele ser lo más complicado, llevar las cosas a término.
La segunda palanca es orientar el día a día al crecimiento. Esto implica elegir prioridades, pocas, pero importantes, no las urgentes. Marchar hacia la eficiencia, ya saben, hacer organizaciones simples y sencillas, flexibles, descubrir los costes ocultos para convertirlos en “beneficios ocultos”, y generar liquidez. Esta orientación del día a día se perfecciona alineando crecimiento y recursos (humanos y técnicos), porque crecer solo con la voluntad sin el acompañamiento de los recursos llevará al fracaso. Y para rematar esta segunda palanca, algo tan necesario como un bien liderazgo que desarrolle un equipo motivado.
La tercera palanca será crear un sistema de crecimiento y desarrollo profesional que le ofrezca a las personas de la organización una carrea profesional, un plan de mejora continua o de crecimiento personal y un gran sentido de reto.
Pero la palanca adicional, y más importante, es la ambición y satisfacción personal por crecer de los empresarios y cierto sentido de reto, que son los motores para enfocarse al crecimiento.
